Sangrado de encías

¿Te sangran las encías ?

Las encías sanas son de color rosado y están firmes sobre los dientes. No sangra cuando te cepillas. Las encías inflamadas a menudo tienen un color rojo, se hinchan y sangran cuando se tocan o, a veces, al comer. Llamamos encías inflamadas en lenguaje dental gingivitis. El mal aliento o el mal gusto también pueden ser un indicio de enfermedad de las encías. Las encías inflamadas no causan dolor en la mayoría de los casos. El sangrado es la primera señal de que algo está mal.

¿Por qué se inflaman las encías ?

Las encías se inflaman por la presencia de bacterias en la placa dental. La placa dental es una capa blanda y pegajosa, blanca amarillenta de bacterias, proteínas de saliva y residuos de alimentos en los dientes. Si deja bacterias (es decir, placa) en los dientes y las muelas durante demasiado tiempo, las encías reaccionarán con una inflamación. Hay un espacio estrecho y poco profundo entre los dientes, los molares y las encías. Llamamos a este espacio el bolsa periodontal  y con encías sanas tiene una profundidad de 1 a 3 mm. La placa dental se forma primero a lo largo de la línea de las encías y luego puede expandirse aún más debajo de las encías en la bolsa periodontal. El sarro se ha convertido en placa dura (calcificada). Ya no puedes retirar  esto tú mismo.

Consecuencias del sangrado de las encías.

Si no se tratan las encías inflamadas, la inflamación puede extenderse hacia la mandíbula donde los dientes y los molares están atrapados en sus raíces. Las encías alrededor de los dientes y los molares se vuelven flácidas y se vuelven más flojas. La placa continúa creciendo en el espacio, en la bolsa periodontal. Esto también hace que se inflame más profundamente debajo de las encías. La sujeción de los dientes y las muelas (fibras que aseguran las raíces en la mandíbula) desaparece. Esto profundiza el espacio y la inflamación continúa. Esto hace que los dientes y las muelas tengan movilidad , incluso se pueden llegar a caer.

La placa que hay en la bolsa periodontal también puede endurecerse hasta convertirse en sarro. A esta  enfermedad de las encías se llama periodontitis o enfermedad periodontal.

 ¿Qué puede hacer si tiene las encías inflamadas?

El sangrado y la inflamación de encías o gingival, se pueden prevenir y curar. El higienista dental juega un papel importante en esto y es el profesional junto con el odontólogo que le dará las instrucciones necesarias, para abordar este problema. Debido a que la enfermedad de las encías es causada por la placa, un buen cuidado oral  muy importante. Para evitar consecuencias, visite al dentista si a usted le sangran las encías, no ignore esta señal. Por supuesto, es mejor prevenir que curar.

Gingivitis

La causa más frecuente de la gingivitis es una mala higiene bucal. Los buenos hábitos de higiene bucal, como cepillarse los dientes al menos dos veces al día, usar hilo dental a diario y realizarse controles dentales periódicos, pueden ayudar a evitar o revertir la gingivitis.

Síntomas

Las encías sanas son firmes y de color rosa pálido, y están bien sujetadas alrededor de los dientes. Los signos y síntomas de la gingivitis comprenden:

• Encías inflamadas o hinchadas
• Encías de color rojo oscuro o violáceo
• Encías que sangran fácilmente cuando te cepillas los dientes o usas hilo dental
• Mal aliento
• Encías retraídas
• Encías sensibles

Causas

La causa más frecuente de la gingivitis es una higiene bucal deficiente que favorece la formación de placa en los dientes, lo que causa inflamación del tejido de las encías que los rodean. Así es cómo la placa puede causar gingivitis:

• La placa se forma en los dientes. La placa es una película pegajosa invisible que está compuesta mayormente por bacterias y que se forma en los dientes cuando los almidones y los azúcares de la comida interactúan con las bacterias que normalmente se encuentran en la boca. La placa requiere una eliminación diaria porque se vuelve a formar rápidamente.
• La placa se convierte en sarro. La placa que queda en los dientes puede endurecerse debajo de la línea de la encía y transformarse en sarro, el cual acumula bacterias. El sarro dificulta la eliminación de la placa, crea una protección para las bacterias y causa irritación a lo largo de la línea de la encía. Para eliminar el sarro, necesitas realizarte una limpieza dental con un profesional.
• Las encías se inflaman (gingivitis). Cuanto más tiempo permanezcan la placa y el sarro en los dientes, mayor será la irritación de la parte de la encía que rodea la base de los dientes, lo que causa inflamación. Con el tiempo, las encías se hinchan y sangran con facilidad. También se pueden producir caries dentales. Si no se trata, la gingivitis puede transformarse en periodontitis y, con el tiempo, puede causar la pérdida de dientes.

Factores de riesgo

La gingivitis es común: cualquiera puede padecerla. Algunos de los factores que pueden aumentar el riesgo de sufrir gingivitis son:

• Malos hábitos de cuidado bucal
• Fumar o mascar tabaco
• Edad avanzada
• Boca seca
• Mala alimentación, lo que incluye falta de vitamina C
• Restauraciones dentales que no están bien ajustadas o dientes torcidos que son difíciles de limpiar
• Enfermedades que disminuyen la inmunidad, como la leucemia, el VIH/sida o el tratamiento oncológico
• Determinados medicamentos, como la fenitoína (Dilantin, Phenytek) utilizada para las convulsiones epilépticas, y algunos bloqueantes de los canales de calcio utilizados para la angina de pecho, la presión arterial alta y otras enfermedades
• Cambios hormonales; por ejemplo, aquellos relacionados con el embarazo, el ciclo menstrual o el uso de píldoras anticonceptivas
• Genética
• Enfermedades tales como ciertas infecciones virales o por hongos

Prevención

• Buena higiene bucal. Eso significa cepillarte los dientes durante dos minutos al menos dos veces al día (por la mañana y antes de ir a dormir) y usar hilo dental al menos una vez al día. Mejor aún, cepíllate los dientes después de cada comida o tentempié, o según te recomiende el dentista. Usar hilo dental antes de cepillarte los dientes te permite eliminar las partículas sueltas de alimentos y las bacterias.
• Consultas dentales periódicas. Debes visitar al dentista o higienista dental periódicamente para hacerte una limpieza, por lo general cada 6 a 12 meses. Si tienes factores de riesgo que aumentan tus posibilidades de contraer periodontitis, como la boca seca, el consumo de determinados medicamentos o el tabaquismo, es posible que necesites una limpieza profesional con más frecuencia. Realizarte una radiografía dental una vez al año puede ayudar a identificar enfermedades que no se detectan con un examen visual de los dientes y a supervisar los cambios en tu salud dental.
• Buenas prácticas de salud. Prácticas tales como una alimentación saludable y, si tienes diabetes, el control del azúcar en sangre también son importantes para mantener una buena salud de las encías.